Gracias a su excelente situación geográfica y al comercio, su crecimiento fue meteórico y a medida que la ciudad iba aumentando de tamaño absorbía a los pequeños pueblos cercanos que han terminado convirtiéndose en barrios como Agüica, Este, Guareiras, Jacán, Laguna Grande, Oeste y Palmillas.
Colón se ha convertido en una ciudad llena de atractivos, situada al pie de la Carretera Central y punto neurálgico de una importante red de ferrocarriles. Cuenta, con muchos lugares para ser visitados por el turista como modernos edificios, parques y jardines o monumentos, los cuales se encuentran perfectamente distribuidos por toda la ciudad.
Una ciudad, que tiene la ventaja de haberse fundado dos siglos después que la inmensa mayoría de espacios turísticos de la isla. Pero, si hay algo que destaque por encima del resto en la ciudad de Colón, y que llame más la atención del visitante, es sin lugar a dudas, su variedad de estilos arquitectónicos.
De hecho, la estética de las viviendas y demás construcciones presentes en la ciudad varió en multitud de ocasiones a lo largo del siglo XIX, en algunos casos de forma puntual y en otros afectó a una extensa área geográfica.
En Colón podemos contemplar distintos exponentes arquitectónicos que van desde el Neoclasicismo, pasando por el Balloum Frame, Ecléctico, Art Noveau, Art Deco, hasta el Racionalismo (movimiento arquitectónico inspirado en formas geométricas simples), una mezcla tal , que dependiendo de en que parte de la ciudad nos encontremos, nos puede parecer que estamos a varios miles de kilómetros de distancia.
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